Amanecer.
La tormenta bajo la nieve
se ha sepultado
Muchas personas que frecuentáis nuestro centro reconoceréis este cuadro que preside el rincón de las terapias. A ambos lados del lienzo un día escribió su autor, de su puño y letra, los versos que encabezan este comentario, un haiku japonés. Si observas bien la foto, apenas se nota con el paso de los años, y es que las tormentas nunca perduran, siempre pasan. Esta es la primera premisa de esperanza para todas las personas que buscáis una salida en la terapia. La segunda es una explosión de alegría. ¿Te has dado cuenta cómo brilla el oro a través de esa grieta?. Sólo cuando nos rompemos descubrimos lo que hay en nuestro interior. Y te aseguro, por propia experiencia y de las personas a las que acompaño en su crecimiento, que lo que llevamos dentro, en lo profundo, siempre supera nuestras expectativas. Gracias Perico, porque lo que tú descubriste un día y lo plasmaste en este cuadro, hoy sirve de testimonio y guía a todas las personas que empiezan el reencuentro consigo mismas. Reproduzco tus palabras: “La crisis es el camino”.