Entre la tierra y el cielo, en medio de las huertas de Conil, en los pinares de Roche, se encuentra una pequeña instalación que anima con cariño y entusiasmo Ambrosi Piña García. Hasta allí fuimos a celebrar el taller SANAR LAS EMOCIONES: LA RECONCILIACIÓN.
Todavía queda en nosotros el recuerdo y el calor de lo vivido: la posibilidad de adquirir una mirada blanda, la memoria de ataduras y vínculos, de piedras y muros, de niños y mayores, de abrazos y despedidas… Nos queda una fuerte convicción, la de ser personas que buscan amar sin rencor, incluso cuando nos hacen daño.
Inolvidable también la suculenta y cuidada comida vegetariana que preparó Ambrosi con los productos de la huerta y mucho amor. Volveremos a este centro no sólo con este taller en años venideros, sino para otras muchas cosas.
Buenos días, deseo q me enviéis información sobre los próximos talleres. Un saludo Teresa